www.canariasdiario.com

'Tamboriles de profundidad' a sólo 20 metros en el Mar de las Calmas

viernes 12 de diciembre de 2014, 18:32h
peces-tamborilesUna embarcación de vigilancia de la reserva marina de La Restinga (El Hierro), con la participación del doctor Jacinto Barquín y la doctora Laura Martín de la Universidad de La Laguna, filmó a tan sólo 20 metros de profundidad en la zona de Las Lapillas, un gran banco de peces de la especie 'Lagocephalus lagocephalus lagocephalus' el pasado 2 de octubre.

Este pez denominado vulgarmente 'tamboril de profundidad', es un pez bentopelágico, de cuerpo alargado y casi cilíndrico de hasta 60 centímetros de longitud.

Su cuerpo presenta un color azulado, acentuándose más en la línea dorsal y blanquecina en toda el área abdominal, de boca pequeña, con dos dientes en cada maxilar en forma de pico cortante, y piel desnuda, salvo en el vientre, donde hay pequeñas espinas imbuidas en la piel, con función defensiva, ya que ante un peligro, traga agua y se hincha, erizando estas espinas.

Suele vivir a centenares de metros de profundidad, y se tiene constancia de capturas a profundidades de 400-500 metros, y solo se observan a profundidades de buceo en contadas ocasiones.

Asimismo, y posteriormente, el servicio de la reserva marina se enteró de que durante unas inmersiones desarrolladas por parte del equipo de Oceana, que estaba realizando un censo visual dentro del proyecto 'Contribución de Oceana a la determinación de la valoración de los servicios ecosistémicos marinos en la isla de El Hierro' en aguas del Mar de Las Calmas, se tomó a poca profundidad una foto de un banco de estos animales.

EVITAR COMERCIALIZACIÓN Y CONSUMO

Ésta fue captada por Carlos Minguel en la zona de buceo de 'El Desierto' el día 22 de septiembre, y en esta ocasión, se habían concentrado en grandes cantidades.

Esta especie está presente en los tres grandes océanos, en aguas tropicales y subtropicales, abunda en aguas del archipiélago canario y desde hace unas décadas viene observándose en el Mediterráneo.

Es un pez tóxico, catalogado así por la presencia de una toxina en su carne y principalmente en sus vísceras, que provoca trastornos intestinales recurrentes, aunque su toxicidad representa un riesgo muy importante cuando es reiterativa la ingesta. Por ello, es necesario reconocerlo y evitar su comercialización y consumo.
¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (0)    No(0)

+
0 comentarios