Puigdemont ha afirmado que Junts está dispuesto a negociar, pero que el acuerdo "no puede ser un parche, sino un acuerdo que debe ser histórico".
"El pacto posible no es un pacto cualquiera sino con Junts, una formación a la que se ha arrinconado y despreciado sin descanso por parte de los dos grandes partidos españoles", ha reprochado el líder independentista.
Puigdemont sabe que el papel de Junts es clave y que de no aceptarlo el PSOE , la repetición electoral estaría prácticamente asegurada.
"El acuerdo debe ser un compromiso histórico, como el que ningún régimen ni Gobierno español ha estado nunca capaz", ha puntualizado.
Mucho más que la amnistía
Pero la amnistía no es lo único que el líder catalán ha pedido para apoyar a Sánchez. En su comparecencia ha subrayado la "desconfianza" que tiene el independentismo del Estado y pide por ello un "mecanismo" para verificar los posibles acuerdos a los que lleguen.
Ha acusado a los diferentes gobiernos de tratar como "terroristas" a los políticos independentistas, por lo que exige ahora un gran cambio en la política para reconducir la situación.
Ha pedido que se fijen como límites los tratados y reconocimientos internacionales que hacen referencia a los derechos humanos, por lo que ha enfatizado que "ninguna de estas referencias son contrarias a la Constitución".
El líder de Junts se ha mostrado contundente: "o se repiten elecciones o pactan con nosotros". Ahora la pelota recae sobre el tejado de Pedro Sánchez, quien en ningún momento ha abogado por la amnistía, pero tampoco desea volver a una repetición electoral.
Ya se preveía que la amnistía iba a estar sobre la mesa, pero el discurso de Puigdemont ha sido muy crítico y contundente, por lo que queda por delante unas semanas intensas y el foco recae de nuevo en el sector independentista.