Ya ha llegado la nueva creación de Blizzard con un nuevo surtido de claves para jugar a la beta cerrada, y con cada jugador que se suma al campo de batalla, crece el hype del público que no puede jugar.
Overwatch trae una suma de conceptos pero nada innovador. Eso para nada es un punto flaco, pues inventar conceptos se ha hecho contadas veces en la historia de los videojuegos. Y es que si hay algo que Blizzard ha demostrado con su trayectoria es que sabe sumar y tejer ideas al milímetro, generando un producto de calidad... o eso pensamos.
Vamos a ser críticos, todos estamos más o menos informados sobre cómo funciona Overwatch, y seguramente sea porque hemos visto a youtubers o similares gritar delante de la pantalla mientras un montón de lucecitas, disparos y misiles se cruzan sin cesar delante de los ojos. En el caso que no sea así, os lo explico brevemente. Overwatch se basa en un shooter de campo de batalla online en primera persona de estilo militar/ciencia-ficción donde el jugador encarna un héroe con un rol concreto y habilidades únicas. Los enfrentamientos de 6vs6 se realizan en un escenario variable, muy bien definido y que es necesario conocer para exprimir al máximo las ventajas que ofrece. Sobre todo el enfoque que se le da a la partida es la coordinación con el equipo por delante de la habilidad individual, lo cual queda un poco en evidencia ante los desbalances tan evidentes entre héroes.
Las críticas en general son muy positivas respecto al contenido que ofrece el juego, no obstante, como siempre, las quejas también se hacen notar. En este caso, no es para menos. Es innegable que Overwatch trae un esfuerzo importante detrás, pero independentemente de eso, uno no puede evitar decepcionarse al ser Blizzard su creador. Es justo decir que no está, ni mucho menos, a la altura de las capacidades del gigante americano. Y que conste que no solo me refiero a los desbalances entre héroes, o la curva de aprendizaje respecto a otros juegos, sino que NO vale lo que piden. Exactamente. Overwatch se comercializará en modo multiplataformas (punto positivo) a un precio de 40-60 euros, dependiendo de la edición que compremos. A título personal, me parece demasiado por un juego únicamente online, sin modo historia cooperativo o individual. Me resulta muy difícil creer que Blizzard no se haya quitado la máscara con este juego, puesto que, si lo resumimos en un sentido amplio, no deja de ser un juego puramente pvp del mismo estilo que Team Fortress 2 (el cual es gratuito) sin nada más que ofrecer. Esa era mi mismo argumento con Star Wars Battlefront en artículos anteriores. Aclaro que no me parece mal que se comercialicen juegos puramente pvp, y que tampoco pido que se incorpore un modo campaña en todos los juegos, pero que sean suficientemente humildes como para poner un precio justo a su producto. No obstante, ningún razonamiento hará que esto cambie, puesto que si compañías como Blizzard deciden poner semejantes precios es porque tienen una amplia fanbase que lo compra sin discusión alguna y hace que todo el proceso de desarrollo i marketing les salga aún más rentable. Hay que tener un poco de ojo con todo esto y discernir cuando una compañía se aprovecha de sus fans y cuando se dedica en cuerpo y alma a complacerlos. Creedme, se nota.
Con todo, personalmente no le pronostico un gran futuro a Overwatch. Quizá sea por el rastro de fracasos que deja el hype tras de sí (The Order, Evolve, HotS, expansiones del mismo WoW...) o sea una simple opinión a título personal. Habrá que ver cómo se presenta ante los e-Sports.