www.canariasdiario.com

Ahora a por las familias

Por Agustín Buades
domingo 27 de septiembre de 2020, 09:38h

Ahora que el vicepresidente de nuestro país pretende dar otro golpe a la familias, esta vez las numerosas con la imposición de nuevas condiciones a estas, es hora de indicarle cómo está la protección de la familia en España comparándola con el resto de Europa y haber si le cae la cara de vergüenza, cosa que no creo que suceda pero por lo menos queda dicho.

España sigue instalada en el furgón de cola de las ayudas estatales a la familia en el contexto europeo. Cuatro evidentes discriminaciones de las familias en nuestro país explican los bajos índices de natalidad y contrastan con el trato que reciben las europeas.

Después de hacer un análisis detallado de las causas de la baja natalidad en España y de las discriminaciones de que son objeto las familias españolas se puede constatar que:

España es el país que menos ayuda a las familias y es uno de los países de la UE con menor tasa de fecundidad. El descenso de la natalidad es más pronunciado cuanto menos ayudas a la familia existen en un país y que las ayudas por hijo tienen una clara incidencia en el ratio de fertilidad En España sigue aplicando una ayuda por hijo a cargo restrictiva y discriminatoria. Mientras en Europa la universalidad de las ayudas es un hecho, en España la mayoría se limita con bajos niveles de renta, convirtiéndolas en ayudas a la integración social, no de apoyo a la familia.

Sólo una octava parte de las familias españolas pueden recibir la ayuda. Mientras el 75% de las familias europeas tienen acceso a dicha ayuda, sólo una octava parte de las españolas pueden recibirla.

Al mismo tiempo, mientras más del 70% de las naciones europeas dan esta ayuda de forma universal, España no sólo está en el grupo que discrimina a parte de sus familias, sino que establece unos límites de renta tan exiguos, que la hacen inaccesible a la mayoría de las familias.

Los límites son tan ridículos que hace que una familia española en la que ambos cónyuges cobrasen el Salario mínimo (SMI) , superarían este límite de ingresos y por tanto estarían excluidos de la citada ayuda.

Y por último ,el importe de la ayuda a las familias españolas, muy alejado de la media europea. La “cuantía ridícula” que perciben las familias españolas por hijo a cargo, 24,25 euros por mes para rentas inferiores a 12.000 euros está muy alejada de los 120 euros al mes (y universal) de media que le destina la mayoría de países europeos.

España sólo supera con esta ayuda a países como Portugal, Grecia o países de la ampliación como Letonia o Bulgaria, con un nivel económico muy inferior y donde esa ayuda puede resultar más importante.

La ayuda que otorga el Estado español a las familias por hijo a cargo es muy inferior al coste real de cuidado de un hijo, que se ha ido incrementando con el tiempo. La prestación familiar por hijo a cargo ha permanecido congelada desde hace por lo menos 10 años.

España debe tomar medidas cuanto antes. Es necesario establecer como medida básica de política familiar (y al mismo tiempo colaborará a una mejora de la demografía) una ayuda por hijo universal, extensible en caso de estudios o paro más allá de los 18 años, con una cantidad suficiente y modulable en función de las necesidades específicas de la familia: familias numerosas, con bajos ingresos, etc.

Esta ayuda no solo beneficiará al equilibrio social y demográfico, sino que representa la mejor forma de que la sociedad colabore a hacer efectivo el derecho de las familias a tener los hijos que deseen (actualmente las mujeres querrían tener un hijo más de media).

Dicho queda.

¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (0)    No(0)

+
0 comentarios