Sánchez pasa de los Emprendedores

Lo tengo que reconocer señores lectores, me he tragado todos los discursos del debate de investidura de este fin de semana y me he leído con detenimiento el discurso integro del Candidato Sr. Sánchez. Seguro que podía haber perdido el tiempo en otras cosas más divertidas, pero creo que ustedes se merecen como siempre un comentario que les pueda gustar más o menos, pero que tenga una base de objetividad.

La palabra Emprendedor/a no ha sido empleada en las varias horas de discurso del candidato NI UNA SÓLA VEZ. Si no se fomenta el emprendedurismo, se dignifica por parte de la administración la tarea de montar empresas, se apoya sin fisuras y se plantea en definitiva un marco para que el emprender no sea casi un suicido o acto heroico como lo es hoy en día en este país, todo lo que nos venden de más gasto en otras áreas, saldrán de nuestros impuestos y habrá más subida de ellos, porque no se creará riqueza, no habrá más puestos de trabajo y alguien tendrá que pagar la factura y ustedes saben tan bien como un servidor que muchos millones de españoles todavía no han salido de la crisis, aunque algunos la quieran cerrar en falso, para que les vengan con más subidas de impuestos.

Tratar a los emprendedores y empresarios como cerditos, de los cuales se les saca todo el partido, pero además no se les quiere dar de comer, ni tan siquiera hacer un guiño en un acto tan importante, como es el pedir el voto de la Cámara para formar un Gobierno es ya el último desprecio hacia nuestro colectivo.

Porque esta fobia hacia las empresas de cualquier tipo, que parece que tiene este posible nuevo gobierno, es preocupante y más con la entrada de los comunistas “famosos por su cariño y apoyo hacia las empresas” la verdad es que no piensan hacer nada por los pequeños o medianos, es más tendrían que intentar que los pequeños o medianos lleguen a grandes, porque en una crisis tienen más posibilidades de supervivencia, las Pymes son un comienzo, no obligatoriamente el final.

Lo que ya nos pasa desde hace tiempo se va a agravar, no sólo el Gobierno da la espalda al tejido productivo, sino que además ya lo hace sin ningún tipo de pudor. Somos gente que no quemamos contenedores, no nos saltamos las leyes y en definitiva estamos tan ocupados por intentar salir adelante que no molestamos a nadie. No incluir la palabra emprendedor/a en este discurso no es un fallo, es sencillamente una declaración de intenciones.