Fuentes del sindicato han señalado que son "poco optimistas" pero que acudirán para demostrar su "buena fe" y "escuchar lo que tengan que decir". Ryanair envió una carta al sindicato Sepla el pasado lunes en la que abría la puerta a negociar un convenio colectivo, seguridad social y legislación laboral española pero sin compromisos concretos en un intento de desbloquear las conversaciones con sus pilotos en España.
Las mismas fuentes señalan que para ganarse su confianza, Ryanair debería estar dispuesta a firmar unas bases previas a la negociación que contemplen sus demandas: el reconocimiento de los sindicatos como parte negociadora y la aplicación de la legislación laboral española.
"Y a partir de ahí a negociar, a hablar y a construir", apuntan desde el Sepla que ven con cautela este acercamiento ante el temor de que sea una "estrategia" de Ryanair para frenar su demanda, que no retirarán hasta que no se firmen compromisos por escrito.
A finales de julio, con las negociaciones ya rotas desde hacia meses, el Sepla demandó a Ryanair ante la AN para reclamar por vía judicial contratos bajo legislación laboral española y la negociación de un convenio, frente a las convocatorias de paros del colectivo de este verano.
Por otro lado, Ryanair y los sindicatos USO y Sictpla que representan a los tripulantes de cabina (TCP) en España de la aerolínea retomarán las negociaciones el miércoles, 5 de septiembre, en una nueva reunión de mediación, tras dos encuentros en agosto sin acuerdo.
Este encuentro podría ser decisivo ante la reunión conjunta prevista en Roma el próximo 7 de septiembre entre sindicatos de TCP españoles, italianos, portugueses, belgas, holandeses, y alemanes para valorar las huelgas del mes de julio y agosto y decidir nuevas movilizaciones.
"Es España permanecemos a la espera de la nueva reunión del día 5 y de los diferentes caminos judiciales que hemos emprendido, tanto en la vía penal por un presunto delito contra la libertad sindical como ante la Inspección de Trabajo y, a partir de septiembre, por la demanda en la Audiencia Nacional por la vulneración de la libertad sindical durante la huelga", señala la nota.
PRIMEROS ACUERDOS.
Ryanair ha aprobado el primer convenio colectivo de pilotos de la compañía en toda Europa, tras el acuerdo entre la aerolínea irlandesa y sus pilotos con base en Italia, ANPAC, que representa a parte del colectivo en ese país --su segundo mercado europeo más importante después de España--, y tras un principio de acuerdo similar en Irlanda.
En este primer acuerdo destaca el compromiso de Ryanair a realizar aportaciones a los fondos de pensiones y de asistencia sanitaria italianos, el pago las contribuciones a la Seguridad Social en Italia y el reconocimiento de la protección social de la maternidad y paternidad. No obstante, requiere medidas adicionales a nivel fiscal pues la aerolínea seguirá tributando en Irlanda.
La aerolínea de Michael O'Leary ya dijo entonces que esperaba reunirse con los sindicatos de pilotos de sus otros mercados principales (Reino Unido, Alemania y España) donde esperaba conseguir nuevos acuerdos colectivos.
Ryanair se enfrentó en agosto la huelga más grande de su historia, en la que se movilizaron pilotos de Alemania, Bélgica, Suecia, Holanda e Irlanda y que se saldó con 400 vuelos y 67.000 pasajeros afectados. Con anterioridad, pararon sus TCP en cinco mercados, entre ellos España.