El cambio físico de Kim Kardashian en los últimos meses ha sido más que notable. Desde que dio a luz a Saint West en diciembre, la socialité se puso a dieta estricta, ha hecho mucho deporte y ha compartido cada progreso en su cuenta de Snapchat. Además, se ha puesto en manos de los médicos.
A la esposa de Kanye West le gusta alimentar la curiosidad por su cambio físico. De hecho, no ha tenido reparos en contar exactamente qué dieta está llevando a cabo, cuando se pesaba y ahora también como ha sido su vista al doctor antes de hacerse su enésimo retoque estético.
Kardashian confió en el Dr. Simon Ouriande Epione, su dermatólogo de confanza, para realizarse una abdominoplastia sin cirugía. Se trata de un estiramiento de la piel, una intervención no invasiva y que no requiere cirugía en la que la capa de colágeno de la piel se calienta de manera que la piel se contrae bajo los efectos del láser. El endurecimiento de la piel se nota de inmediato.