Habría que preguntar a cualquiera de nuestros diseñadores del carnaval, por tiempo que disponen para idear, diseñar, fabricar y exponer unos de sus fabulosos trajes de reina para el carnaval de Santa Cruz de Tenerife. Sus respuestas nos hablarían de tiempo, de trabajo, de paciencia y sobre todo de mucho esfuerzo. Si se le preguntara a quienes trabajan en todo lo que comporta la creación de un escenario, seguramente a lo expuesto, se le añadiría, planificación, diseño y mucho de creatividad. Cuando se une todo esto y lo anterior, el resultado suele ir rumbo al éxito, cogiditos de la mano. Pues con esos mimbres, parece como si alguien hubiera decidido convertir un barrio en otra cosa. Un barrio es como un escenario, donde se pueden acometer cosas muy interesantes que redunden en el bienestar de todas las personas que allí conviven.
Últimamente estamos siendo testigos de la gran transformación, que en uno de los barrios de Santa Cruz de Tenerife, se está llevando a cabo por parte del Excmo. Ayuntamiento de la ciudad. Los responsables de dicha Institución hablan de que el cambio que se verá, una vez terminen las obras, será impresionante. Ojalá que así sea, aunque en estas fechas de carnavales, más bien cabría pensar que realmente en lo que se está convirtiendo es en un gran parque temático, al más puro estilo de los existentes por la geografía nacional y mundial. Tampoco es tan difícil de imaginar; bastaría con ver las posibilidades del lugar, contar con unos buenos artistas, disponer del personal necesario para el desempeño de los perfiles de actuación, además de tener el tiempo y dinero suficiente. Si contáramos con todo eso, que contamos, el futuro del barrio del Toscal ya estaría decidido, incluso antes de que los vecinos se den cuenta.
De hecho, el proyecto ya comenzó desde hace tiempo. Justo cuando comenzaron las obras de la arteria principal que lo recorre de una punta a otra. La calle de la Rosa, se transformaría -se está transformando- en la gran avenida comercial del Parque de atracciones. En cuanto las grandes multinacionales sepan que van a contar con aceras anchas y muy poco tráfico rodado, seguro que estarán con las chequeras preparadas para adquirir sus locales donde instalar sus apetecibles lugares de ocio y restauración. A dicha calle, le seguirán, como se sabe, una actuación parecida en la también importante calle de San Martín. Ahí además ya existe un espacio que, salvo que alguien lo convierta en un solar donde construir un edificio de altura considerable como para instalar en su parte más alta al King Kong -deberá estar guardado en algún almacén, si es que aún existe- y ya tendremos el restaurante temático. Otra de las calles, la que lleva el nombre de Santiago, se peatonalizará en su totalidad, lo que le dará vidilla a la gran cantidad de casitas pequeñas que ayer eran rincones familiares y mañana serán boutiques de alta costura o tascas típicas que traerán sabores de todo el mundo al parque temático de Canarias: El Toscal.
Habrá, eso sí, que buscar una temática que aglutine todas las atracciones y puntos de ocio que se organicen en, el antes barrio y mañana Parque de atracciones. Podría ser cualquier atracción que tuviera que ver con los antiguos pobladores de la isla, aunque eso está muy visto y tal vez no tendría mucho tirón a la hora de venderlo. Podría ser, incluso, algo que tuviera relación con el mundo marítimo y portuario, y no estaría mal; sobre todo, si tenemos en cuenta los orígenes de su expansión como barrio.
Alguien con capacidad de pensar, seguro que le daría una vuelta al proyecto y nos aportaría una respuesta lo suficientemente válida como para conseguir el éxito esperado. ¿Quién mejor que el señor alcalde que tanto ha hecho por nuestros carnavales? Podría servir. Es más, seguro que será la persona ideal. Ahora hemos de conseguirle un equipo de trabajo y para eso, nada mejor que alguien que sea capaz de asumir retos. Esa persona también la tenemos en la plantilla de concejales. Lo único que habrá que hacer es proponerle que deje de pensar en plantar pinos y retarlo a que lleve a la práctica esta novedad del Parque Temático. Pues ya que estamos en África, ¡arre burro!
Una vez que tenemos en marcha el envoltorio con las magníficas reformas del barrio, para convertirlo en ese parque temático, por donde, sin duda, paseará la guagua turística -¡Dios mío, que aguante el firme!- y muchas de las casas seguro que ya está formando parte de la agenda de algún/os agentes de las inmobiliarias, para su posterior transformación y rentabilizar el polígono de ocio, solo queda ir pensando en una animación que tenga que ver con África.
En estos días ya han comenzado los ensayos donde se le ha permitido participar a algunas personas que han venido en esos artilugios marinos desde aquel continente y que sin llegar a ser “achipencos”, muchos han funcionado como tal; solo que sin sacar ¡ni una maldita sonrisa! a su llegada. Tampoco ha destacado la intención de acabar, con esos viajes mortales, por parte de quienes han de proponer y aprobar leyes que defiendan al pueblo al que se deben.
Ese grupo de personas han mostrado su interés profundo de participar en la puesta a punto del parque del que hablo y ha conseguido franquear la puertas de entrada de algunas viviendas que lucían viejas, pero cerradas -situación que era intuida, solo, por el pueblo-. Compañeros suyos de posible reparto, forman colas caminando hacia Santa Cruz, para ver si pueden tener algo de protagonismo en esa coreografía. Frente a aquel grupo de ambientación, se forma un conjunto de personas ataviadas con trajes típicos de ciudadanía local, que con cacerolas y pancartas -se ve que el presupuesto del Ayuntamiento, se lo ha gastado casi todo en pintar, repintar, señalizar, poner separadores de carriles, quitar separadores de carriles, volver a poner separadores de carriles y tratar de vender los beneficios del otro gran producto que es el carril bici-patinete-no peatón-, animan desde la calle a que el otro grupo de actores que se asoman desde la azotea, opten por hacer el salto del Ángel -en el guion, nada de eso está previsto; pero a alguien del grupo de locales se le oyó proponerlo, y aún están mirando a ver si el libreto recogía la frase-. Junto a estos dos grupos protagonistas, se le une una representación de las fuerzas de seguridad del Estado, vestidos con uniformes de policía local y de la nacional, que solo pueden hacer acto de presencia y formar, mostrando el límite hasta donde, cada uno de los otros dos grupos puede llegar, y poco más. Parece ser que sin leyes que les permitan actuar, solo eso se podrá hacer. En cualquier caso, su presencia en la zona, le da ese puntito de morbo para saber si el guionista del espectáculo -transmitido ya más allá de lo local- ha decidido aportar la figura de Alguien disfrazado del Cid Campeador o de Babieca, antes de que carguen primero contra los locales que contra los del “castillo”. El Toscal está viviendo la transformación de su barrio en un parque Temático a modo de homenaje a estas fiestas. Solo falta la foto con la placa, pero eso… en la inauguración. De momento, como decía el gran Pepe Monagas, vayamos comprando las entradas.