El consejero socialista en el Cabildo de Tenerife Javier Rodríguez Medina ha calificado de desastrosa la gestión del grupo de gobierno de Coalición Canaria y Partido Popular en materia de residuos, tal y como se ha constatado en la reunión de balance de la comisión de seguimiento del Plan Territorial Especial de Ordenación de Residuos. La planta de recuperación de residuos que no son separados en origen estuvo parada cuatro meses, lo que llevó a que ocho mil toneladas de residuos acabaran enterradas en las celdas de vertidos del Complejo Ambiental.
Tenerife cerró 2024 con los peores datos de recuperación de residuos de su historia. O, al menos, desde que existe el Plan Territorial Especial de Ordenación de Residuos (PTEOR), una estrategia que tiene cuarenta años. Así lo ha explicado el consejero socialista en el Cabildo de Tenerife Javier Rodríguez Medina, responsable de esta misma área en el mandato anterior.
Esto significa que, durante el año pasado se dispararon las cifras de residuos enterrados en Arico, según se puso de relieve en la primera reunión de la comisión de seguimiento del plan de 2025 celebrada el 14 de enero en el pabellón Santiago Martín, en la que también participan los ayuntamientos y en la que se hizo balance de la evolución de la estrategia a lo largo de 2024, el primero de gestión completa del grupo de gobierno insular de Coalición Canaria y Partido Popular.
El empeoramiento de la gestión llevó a que la planta de recuperación de los residuos que los usuarios no separan en origen, denominada “planta de tratamiento mecánico todo en uno”, estuviera casi cuatro meses fuera de servicio.
Esta planta recupera mensualmente en torno a 2.000 toneladas de residuos, que se evita que vayan a parar al suelo de Arico, donde se entierran.
Sin embargo, el retraso de la búsqueda de soluciones a los efectos del incendio supuso que Tenerife estuviera los citados cuatro meses sin ese tratamiento de recuperación y enterrando los residuos, con un total de casi ocho mil toneladas. Ocho mil más, añadidas a las que habitualmente se entierran.
Hay que tener en cuenta que la Isla genera unas 670.000 toneladas de residuos al año, aproximadamente 1.800 toneladas al día, de las que se termina recuperando un máximo del 3,5%, lo que da cuenta de la importancia que tiene dicha planta de “tratamiento mecánico de todo en uno” para en el entorno medioambiental ya que, “aunque el porcentaje sea bajo, debido al elevado volumen que se maneja, las cifras de recuperación resultan determinantes y nada despreciables”, ha subrayado el consejero.
En el mandato anterior se reconstruyó una planta completa para bioestabilizado (materia orgánica), se amplió la planta de recuperación de envases, que estaba colapsada, y se retiraron más de 8.000 toneladas de neumáticos para garantizar una mayor seguridad y para dejar espacio a la instalación de empresas de reciclaje. Sin embargo, la gestión de CC y PP no cuenta con ninguna mejora en este ámbito, sino que ha dado pasos atrás.
Javier Rodríguez ha recordado al grupo de gobierno que preside Rosa Dávila que Tenerife no se puede permitir esa dinámica en materia de residuos y de vertidos, por la fragilidad de su situación. Sin embargo, desde que el actual gobierno insular está al frente de estas políticas, “nos encontramos con situaciones alarmantes, como que se disparen los residuos que terminan enterrados o el cierre de playas y de zonas del litoral por su contaminación”.
Javier Rodríguez Medina ha explicado que todos los pasos adelante que se han dado en la Isla “han venido de la mano del PSOE, empezando por el convenio que está permitiendo la construcción de depuradoras para evitar los vertidos al mar y reutilizar el agua para la agricultura”.