En rueda de prensa desde el Palau de la Generalitat en la que también han participado la consellera de Salud, Alba Vergés, y el conseller de Interior, Miquel Buch, Budó ha concretado las nuevas medidas que tienen una duración inicial de 15 días y entre las que se cuenta pedir a la población de estas ciudades quedarse en casa y "no acudir a segundas residencias este fin de semana", aunque se trata de una recomendación y no de una obligación.
Así, la recomendación pasa por salir solo para trabajar; ir a centros de salud; cuidar de personas mayores, niños, discapacitados y dependientes; para comprar productos básicos; para comprar en establecimientos con cita previa; acudir a entidades financieras, realizar acciones judiciales o notariales, exámenes y mudanzas; practicar deporte con el núcleo de convivencia habitual; ir a huertos familiares de autoconsumo; y por causas de fuerza mayor.
Se han suspendido también las actividades culturales, de espectáculos públicos, recreativas, deportivas y de ocio nocturno que afecta a gimnasios, salas de fiestas, discotecas y cualquier otra que implique un número importante de personas que no pertenecen al mismo grupo de convivencia. En el interior de bares y restaurantes, el aforo se limita al 50%, mientras que en las terrazas, el aforo será el resultado de aplicar la distancia de seguridad de dos metros entre mesas y también han pedido priorizar los servicios que eviten el contacto físico como el reparto a domicilio.
Los centros de trabajo públicos y privados deben adoptar medidas higiénicas, poner a disposición de los trabajadores agua y jabón o geles hidroalcohólicos, certificar el uso obligado de la mascarilla, evitar la coincidencia masiva de personas y potenciar el uso del teletrabajo.
La actividad comercial se tiene que realizar, en la medida de lo posible, sin contacto físico con los clientes y los establecimientos deberán extremar las medidas higiénicas, de prevención y de seguridad. Las bibliotecas y museos seguirán abiertos con sujeción al plan sectorial del Plan de actuación del Procicat, así como los 'casals' y colonias de verano, que deberán cumplir con los criterios generales.
En relación a Lleida, Buch ha detallado que los municipios afectados serán los de la comarca de la Noguera y algunos de la comarca del Segrià: Els Alamús, Albatàrrec, Alcanó, Alcoletge, Alfarràs, Alfés, Alguaire, Almacelles, Almatret, Almenar, Alpicat, Artesa de Lleida y Aspa.
También lo estarán Benavent de Segrià, Corbins, Gimenells i el Pla de la Font, Llardecans, Massalcoreig, Maials, Montoliu de Lleida, La Portella, Puigverd de Lleida, Rosselló, Sarroca de Lleida, Sudanell, Sunyer, Torrebesses, Torrefarrera, Torre-serona, Vilanova de Segrià, Vilanova de la Barca.
Vergés ha dicho que en estas zonas se ha producido un crecimiento de los casos, y que las medidas que se aplicarán son generalistas y fáciles de entender, pero que se deben adoptar en una zona en la que la transmisión puede ser alta: "Sabemos que, en algunas zonas, puede que no haya tantos casos y se pueden ver como injustas".