La economía de España se contraerá este año un 12,8 por ciento, la mayor caída entre los países más avanzados, debido a la pandemia del coronavirus, mientras que el déficit español se disparará al 13,8 por ciento este año y la deuda rozará el 124 por ciento, según las nuevas previsiones divulgadas este miércoles por el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Los nuevos cálculos del FMI para la economía de España suponen un drástico empeoramiento de lo que había anticipado en abril, cuando calculó una caída del PIB del 8 por ciento.
"(En las economías avanzadas) parece que ha habido un golpe más profundo a la actividad en la primera mitad del año, con señales de distanciamiento voluntario incluso antes de que se impusiesen las órdenes de reclusión. Esto también sugiere una recuperación más gradual en la segunda mitad dado que el miedo al contagio es probable que continúe", indicó el Fondo.
El FMI vaticina para Italia la misma contracción económica que España, un 12,8 por ciento, tasa que empeora en comparación con la previsión que hizo en abril para el país transalpino, que fue del 9,1 por ciento.
Francia, según las nuevas previsiones del Fondo, registrará también un notable derrumbe del 12,5 por ciento este año, más de cinco punto porcentuales peor que lo previsto en abril, y Alemania, la primera economía de la eurozona, caerá un 7,8 por ciento, ocho décimas peor de lo previsto.
Para el conjunto de la zona euro, el FMI también prevé un empeoramiento, ya que ahora calcula que su economía caerá este ejercicio un 10,2 por ciento, frente al 7,5 por ciento previsto en abril.
De cara a 2021, la recuperación en la zona euro se sitúa ahora en el 6,3 por ciento, con España y Italia en esa misma cifra de crecimiento para el próximo año, Alemania un 5,4 por ciento, y Francia un 7,3 por ciento.
"Esta es la peor recesión desde la Gran Depresión de 1930. No ha habido un país que se haya librado", dijo Gita Gopinath, economista jefa del FMI, en rueda de prensa para presentar el informe de perspectivas.
En este sentido, el FMI indica que, a medida que "las economías se reabren, deberían moverse gradualmente de la protección de empleo y empresas a facilitar la recuperación y eliminar los obstáculos a la reubicación de empleados".
En concreto, el organismo dirigido por Kristalina Georgieva citó que las medidas fiscales puestas en marcha por los gobiernos, que según el FMI suman ya más de 10 billones de dólares, han ayudado a la reactivación económica prevista para el año que viene, pero con el problema de haber disparando la deuda pública y el déficit.
Por ello, aprovechó la ocasión para dar la voz de alarma sobre el futuro: "Debido a los elevados niveles de deuda, podría quedar limitada la capacidad de mayor estímulo fiscal y supondrá un importante desafío para muchos países".
En el caso de España, cerrará el año con un déficit fiscal del 13,9 por ciento respecto al PIB, y superior incluso al 9,5 por ciento que se auguraba en abril, mientras para 2021 se reducirá al 8,3 por ciento, 1,6 puntos porcentuales por encima de lo previsto anteriormente.
El endeudamiento, por su parte, se disparará al 123,8 por ciento sobre el PIB este año, 10,4 puntos más de lo se proyectaba hace tres meses.
El desequilibrio fiscal español estará el 11,7 por ciento de media esperado para el conjunto de la zona euro, con Francia en el 13,6 por ciento, Italia en el 12,7 por ciento y Alemania en el 10,7 por ciento.
En esta ocasión, el Fondo no actualizó sus previsiones de la evolución del desempleo, que en abril, con previsiones menos sombrías, señaló saltaría de cerca del 14 por ciento que se registraba a finales de 2019 a un 20,8 por ciento al cierre de este año.
A comienzos de mes, el organismo alabó la reciente aprobación en España del ingreso mínimo vital (IMV) para las familias más necesitadas.
"Asegurar el respaldo suficiente para los hogares más vulnerables es especialmente crucial", indicó Gerry Rice, portavoz del Fondo.
El sistema aprobado por el Gobierno español finalmente establece ayudas de entre 461 y 1.100 euros mensuales (500-1.200 dólares) en función del número de miembros de la familia, que se recibirán hasta que cese la situación de necesidad.