En una entrevista de Europa Press, ha asegurado que el PSOE no tiene "ningún interés" en negociar con JxCat y así interpreta que Pedro Sánchez ya tiene los votos asegurados por parte de ERC.
Tras preferir que Sánchez opte por los republicanos antes que por Cs, ha argumentado que ERC está en las mejores condiciones para ser exigente en la negociación: "Es la única oportunidad que tiene Sánchez de hacer un gobierno entre PSOE y Unidas Podemos. Está en las mejores condiciones para negociar. Por tanto, luego nadie podrá poner excusas".
Según Bel, en la negociación habría que poner sobre la mesa una solución que permita al pueblo catalán decidir libremente sobre una propuesta, exigir al PSOE que aclare la suya y buscar una "solución" para los presos independentistas y los que están fuera de España.
Igualmente, el diputado de JxCat cree es un buen punto de partida que salga una mesa de diálogo de la negociación entre socialistas y republicanos, pero "esto ya existía hace un año. Tenemos que ver si durante este año hemos aprendido y no se vuelve a plantear esta mesa como se hizo, porque fue un fracaso. En esta mesa, todas las partes deberán aceptar que el referéndum es un escenario", ha explicado.
Bel es partidario de configurar una mesa entre Gobiernos y otra mesa entre partidos, donde cree que podrían abrirse muchos escenarios.
En cuanto a los presos, sostienen que la sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) debería conllevar la nulidad del juicio del 1-O o una amnistía.
Igualmente, da por hecho que se están negociando los próximos Presupuestos Generales del Estado (PGE) que deberán ser diferentes a los que presentaron los socialistas antes del verano porque fueron enmendados en su totalidad por parte del grupo de Gabriel Rufián. Pese a todo, cree que los PGE pueden corregir solo una parte del conflicto entre Catalunya y el resto de España, la vinculada con el déficit fiscal y las inversiones en infraestructuras, porque también hay "el déficit democrático, que es más político".
Aunque haya investidura, no cree que se agote la legislatura por la dificultad que pueden tener los socialistas para tejer acuerdos que permitan sacar adelante sus iniciativas, dado que tendrán que buscar aritméticas alternativas.
"Si hay investidura, no será una legislatura de un año pero tampoco de cuatro, aunque todo puede cambiar. Sánchez y Pablo Iglesias habrán hipotecado mucho su futuro político a este gobierno, y si fracasa a corto plazo habrán fracasado los dos", ha subrayado.