Un tiroteo acaecido este martes en un centro hospitalario de la República Checa ha dejado el balance de seis personas muertas y otras dos heridas. El presunto autor de los disparos, un hombre de 42 años, huyó en coche del lugar a toda velocidad, perseguido muy de cerca por agentes policiales que llegaron a efectuar varias detonaciones contra el vehículo del fugitivo. Este, al verse acorralado por las fuerzas de seguridad, optó por quitarse la vida disparándose un tiro en la cabeza.
El suceso ha tenido lugar a primera hora de la mañana cuando un desconocido irrumpió en las dependencias del Hospital Universitario de Ostrava, situado en el Nordeste del país. Sin mediar palabra, el hombre empezó a disparar indiscriminadamente contra pacientes y personal sanitario del centro, matando a seis personas y causando heridas a otras dos.