Alrededor de las 22:50 horas del 8 de diciembre de 1980, poco después de que Lennon y Ono volvieran al apartamento de Nueva York donde vivían, Mark David Chapman disparó cinco veces por la espalda contra Lennon de las que cuatro alcanzaron su objetivo.
Lennon fue trasladado hasta el Hospital Roosevelt aunque nada pudo hacerse por salvar su vida y fue dado por muerto a las 23:00 horas.
Su cuerpo fue incinerado en Nueva York y Yoko Ono esparció sus cenizas en Central Park donde más tarde se creó el monumento conmemorativo Strawberry Fields.
El asesino, Mark David Chapman fue condenado a cadena perpetua y aún permanece en prisión después de que le haya sido denegada en repetidas ocasiones la libertad condicional.