El cinturón de seguridad es el elemento de seguridad pasiva más eficaz de los vehículos y el que más vidas ha salvado. Según la DGT, los datos de la encuesta se ven reflejados también en las cifras de siniestralidad vial. En 2017 el 24 por ciento de los fallecidos de 12 años y más, usuarios de turismos y furgonetas, no utilizaban el cinturón de seguridad y en las vías urbanas no lo llevaban 35 de los 87 fallecidos. En lo referido a los heridos hospitalizados en vías interurbanas no utilizaban cinturón el 9 por cien y en las urbanas ese porcentaje se elevó al 18, hecho que constata que el uso de dicho cinturón es menor en las ciudades que en carretera.
La campaña pone especial énfasis en el uso de estos dispositivos de seguridad entre los más jóvenes. Según datos de 2017, cinco de los 17 menores de 12 años fallecidos que viajaban en turismo o furgoneta no hacían uso del mismo.
Fuentes de la DGT señalan que el uso del cinturón de seguridad es uno de los pilares fundamentales de la seguridad vial, motivo por el cual, esta campaña se enmarca dentro del calendario anual de actuaciones especiales previstas por la Organización Internacional de Policías de Tráfico (TISPOL). Esto significa que en numerosos países las policías de tráfico van a incrementar la vigilancia de su uso.
Por su parte, la Organización Mundial de la salud, recoge también en sus informes, la importancia del uso de este dispositivo y aboga a que los países incluyan en su legislación, la obligatoriedad de la utilización del cinturón de seguridad. Aproximadamente 105 países, que representan el 67 por ciento de la población mundial, cuentan con leyes que obligan al uso de este elemento de seguridad por parte de todos los ocupantes de un vehículo.