La misma semana en que se han debatido las pensiones en el Congreso va la Ministra de Defensa y pide 10.000 millones de euros para comprar unas cuantas cosillas de estas de ir a la guerra. Como poco es curioso que la misma Cospedal que no siente ni padece al subir sólo un 0’25% las pensiones a los abueletes tenga el morrazo de pedir este pastizal de casi dos billones de las antiguas pesetas para poner al ejército español to guapo como diría mi ahijada. Justifica la ex presidenta de Castilla La Mancha con que su amigo Trump pide que España como miembro de la OTAN destine un 2% del PIB patrio al Ministerio de la Guerra. Esto evidencia que hay dinero para lo que al PP le interesa como son el rescate de autopistas, del Castor, para sus amigos de los bancos o para liarse a tiros en Perejil.
Hay que ver la manga ancha que tiene mi amigo Montoro con su colega de Defensa mientras asfixia y estrangula a las CC.AA. y ayuntamientos, mientras los pensionistas hacen milagros para llegar a fin de mes y mientras nos intentan vender la moto de que ellos no despilfarran, que la culpa es nuestra por manirrotos e irresponsables. En lo que no se equivocan es en que somos culpables y tenemos lo que nos merecemos. Somos tan cobardes que cuando llegan Elecciones nos invade el miedo y acabamos votando al Partido Popular como un mal menor. Es un voto de miedo, de complacencia y de desesperanza. Hace falta que los españoles nos pongamos de acuerdo para echar de una vez por todas a este Gobierno mediocre, de mentirosos, manipuladores, pacato y cobarde. Necesitamos un cambio, necesitamos re ilusionarnos, necesitamos volver a soñar en un futuro mejor y a no conformarnos con migajas. No dejemos que nos deslumbren con banderitas y desfiles y las próximas Elecciones echemos de la Moncloa a Rajoy.