Se acerca el 8M con la convocatoria de una huelga feminista, pero siguen errando el tiro con dichas iniciativas. En el Día de la mujer trabajadora la corresponsabilidad sigue siendo la asignatura pendiente. Los padres deben implicarse más, y responsabilizarse de igual a igual. Se dice muy acertadamente que la mujer ha salido del hogar, pero el problema es que el hombre no ha entrado.
El valor del cuidado del hogar y de los dependientes en el ámbito familiar debe ser revalorizado con una legislación que permita incentivar la corresponsabilidad en las tareas del hogar, tanto en el entorno económico como en el profesional y social. Esa responsabilidad compartida hará especial referencia al cuidado de las personas dependientes en el entorno doméstico, especialmente los niños.
A partir de la distinción entre conciliación de trabajo con vida personal y conciliación de trabajo con familia, se desarrollará la idea de que se debe ofrecer a los trabajadores sin que ello perjudique a su carrera profesional y a su esfera económica y social. Y, al mismo tiempo, la consideración de las necesidades del empleador, en quien no se ha puesto mucho énfasis hasta ahora. Se ha ido ofreciendo cada vez más conciliación a los trabajadores pero no se ha pensado en las repercusiones que la conciliación tiene en los beneficios de la empresa o al menos no se ha escuchado lo que los empresarios necesitan ante estas situaciones. Esa es la gran asignatura pendiente de la conciliación.
Además, no se trata solo de decidir quién debe correr con el coste del sueldo en los casos de baja maternal, sino que abarca muchas más cosas, como la atención al hijo enfermo, la resolución de la incompatibilidad entre horarios laborales y escolares, la asistencia a las reuniones de padres en el centro educativo, etc. Está demostrado que la productividad de un trabajador aumenta si puede atender todos esos casos.
Así las cosas dejémonos de huelgas y pongámonos a trabajar para conseguir una real correspondencia en los hogares que indudablemente hará más felices a las mujeres, a los hombres y a los menores