OPINION

Malditos políticos

Juan Antonio Tormo | Lunes 02 de octubre de 2017
Hace ya bastantes años, no sé si los suficientes para algunos, el Esperanto se perfilaba como una posible lengua común para todos los paises, hablándose mucho de este asunto, aunque sin llegar a fructificar. También hace muchos años, una Europa devastada por la Guerras Mundiales, se unió para intentar ser importante dentro de la economía Mundial. También hace 39 años este pais nuestro acordó y voto una Constitución para pasar página de una etapa nefasta de la historia.Incluso muchos nos hemos emocionado con palabras como las del astronauta español Pedro Duque, diciéndo que desde el espacio no veía fronteras.
Estos son ejemplos de causas que nos unieron a todos sin apenas discrepancias porque pensábamos todos, que solos podíamos ir más rápidos pero unidos llegaríamos más lejos. Pero como en los mejores cuentos de Disney, siempre que queda alguien que cree que todos están equivocados y el es el único poseedor de la verdad, no parará hasta intentar cambiar las cosas, aunque muera en el intento y se lleve por delante a los que hagan falta.
Falsear la historia, adoctrinar en los colegios, repetir incansablemente mentiras puede dar resultado, de hecho en algunas torturas no se emplea violencia física sino tan sólo encerrarte viendo constantemente las mismas imágenes o sonidos hasta que te vuelves loco. En este caso lo que puede pasar es llegar a creer las mentiras, incluso mentirte a ti mismo, facultad solo alcanzada por nuestra especie.
Porqué digo esto, porque no puedo parar de ver en mi mente la imagen de una padre y no ha sido el único, poniendo en peligro más que evidente a su hijo de corta edad, supongo que pensando que todo es bueno por la causa. Hasta ahora ese grado de fanatismo era sólo propio de fanáticos religiosos o terroristas, ahora me pregunto, hasta que punto ese padre esta fanatizado con ideas “políticas” para llegar a ese punto.
Creo que este 1 de octubre, será punto de inflexión para muchos, pero no se hagan ilusiones, para los que nos han llevado a esto no habrá reflexión, lo suyo sólo se puede tratar con fármacos.

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