Las cerdas del cepillo están especialmente diseñadas para simular la lengua de un gato y que éstos sientan la misma sensación - o una muy aproximada- que cuando ellos mismos, o sus compañeros felinos, se lamen. En cuanto a los objetivos de este curioso invento no existe una información concreta o detallada. Tan sólo un vídeo que se publicó en YouTube donde se puede ver a varios usuarios poniendo en marcha el cepillo.