Los espacios naturales de Tenerife, que incluyen destacadas áreas como el Parque Nacional del Teide, el caserío de Masca, la Reserva de la Biosfera de Anaga o el Parque Rural de Teno, representan lugares de gran valor ecológico y paisajístico. No obstante, el incremento de las visitas turísticas y el auge de la afluencia de residentes que se ha puesto de manifiesto con especial intensidad tras el periodo de la pandemia, está generando una presión significativa sobre estos entornos frágiles que requieren de una respuesta adecuada en forma de una mejor ordenación del flujo de visitas, de la disposición de los estacionamientos, de una señalética adecuada y accesible, de una vigilancia reforzada y de la incorporación de los dispositivos de información pertinentes en orden a proporcionar una mejor experiencia de la visita y a evitar los riesgos derivados de la saturación y de un uso o tránsito inadecuados de estos espacios durante la visita.
El Cabildo plantea la necesidad de actualizar la estrategia de gestión que desarrollan las diferentes áreas de la Corporación insular en aras de conseguir un destino más sostenible en todas sus vertientes, especialmente, en la ambiental. A través de esta estrategia se propone conciliar la conservación de los espacios naturales con el desarrollo económico y el bienestar de los habitantes de la isla. Esta nueva herramienta de tributación finalista partiría de un enfoque integral que aborda tanto la preservación del medio ambiente como la mejora de la experiencia del visitante. La propuesta de implementar una tasa para la mejora de la conservación y de la experiencia de la visita en los espacios naturales protegidos de Tenerife se incorporaría como parte integrante de dicha estrategia, no como un mero paso aislado, sino como una medida clave para garantizar la sostenibilidad a corto, medio y largo plazo, acompasada, por tanto, con las medidas previstas en los instrumentos de ordenación del uso y gestión de los espacios referidos.
La recaudación de esta tasa podrá destinarse a la conservación, el mantenimiento y la mejora de estos entornos naturales, asegurando así que las futuras generaciones también puedan disfrutar de su esplendor y biodiversidad, así como a la implementación de nuevos servicios como los descritos anteriormente. En ese sentido, el Cabildo considera que cualquier tasa implementada debe gestionarse de manera transparente y revertir de manera directa y eficiente en la protección de los recursos naturales, teniendo en cuenta en la configuración del hecho imponible la contribución permanente que realizan los residentes en la isla al sostenimiento regular de la gestión de dichos espacios. De esta forma, el estudio de la propuesta para la implantación de una tasa para la mejora de la conservación de los espacios naturales y la prestación de nuevos servicios en los espacios naturales en Tenerife busca alcanzar un equilibrio entre la preservación ambiental y el desarrollo sostenible, asegurando que la isla continúe siendo un destino turístico excepcional sin comprometer su invaluable riqueza natural.