Alberto Paz detalla que “el furtivismo pesquero es una preocupación general en la Isla, ya que amenaza la sostenibilidad de los recursos pesqueros y tiene impactos negativos en el ecosistema marino, la economía de estas comunidades y la seguridad alimentaria”.
“Una de las medidas que estamos planteando implementar es el uso de tecnologías y sistemas de seguimiento para mejorar la supervisión y el control de las actividades pesqueras en La Palma”, añadió el consejero.
Además de esta problemática, la reunión ha servido para tratar otros asuntos relacionados al sector como el balizamiento de las artes de pesca y próximas convocatorias de ayuda al ámbito pesquero.