Esta práctica, que puede parecer bienintencionada, puede generar importantes problemas de salud pública y limpieza viaria, tanto por la proliferación de ejemplares de estos animales como por la aparición de otras plagas asociadas, como ratas o cucarachas, ante la presencia de restos de comida en las calles.
El Consistorio instalará carteles en las zonas detectadas de mayor conflictividad, como Tabaiba Baja, Costanera o Radazul e intensificará la presencia policial. En el caso de los gatos, cabe especificar que en El Rosario ya existen distintas colonias identificadas, atendidas por personas voluntarias y que se rigen por el método CES (Captura, Esterilización y Suelta).
Cabe recordar que la Ordenanza Reguladora de la Protección y Tenencia de Animales de Compañía de El Rosario estipula como infracción leve “alimentar a los animales que se encuentran fuera del ámbito particular, sean estos silvestres o abandonados desde los domicilios particulares, en ellos y en zonas comunes de edificios o comunidades de propietarios, así como en la vía y espacios públicos, excepto las personas autorizadas por el Ayuntamiento”. Las sanciones oscilan desde los 30’05 euros a los 150’25 euros, dependiendo de la gravedad o reincidencia.