Yamaha ha incorporado a su equipo al piloto mallorquín Jorge Lorenzo, quien a partir de ahora ejercerá como piloto de pruebas de la marca japonesa. El pentacampeón del mundo anunció su retirada de la competición oficial hace algo más de dos meses, a sus 32 años, a causa de las lesiones que le impideron ofrecer un buen rendimiento durante la última etapa de su carrera, enrolado en las filas de Repsol Honda.
El piloto mallorquín Jorge Lorenzo se ha convertido este jueves en nuevo piloto de pruebas del equipo Yamaha, dos meses y medio después de que el pentacampeón del mundo anunciase oficialmente su retirada de la competición de motociclismo, el pasado 14 de noviembre, en circuito de Cheste (Valencia).
En el último tramo de su carrera, Lorenzo, de 32 años, fichó por Repsol Honda después de dos temporadas irregulares en Ducati, pero los resultados no cumplieron las expectativas que se habían creado, en gran parte debido a las lesiones que mermaron sustancialmente su rendimiento.
Sin embargo, Yamaha, el equipo en el que el deportista balear vivió, posiblemente, sus mejores años en la categoría 'reina', ha querido contar de nuevo con Lorenzo esta vez en calidad de piloto de pruebas, y lo ha hecho en la misma semana en que la escuadra japonesa ha hecho oficial la renovación de Maverick Viñales y la incorporación del corredor francés Fabio Quartararo como nuevo compañero del propio Viñales.
Así pues, el equipo de pruebas de Yamaha Factory Racing es el nuevo destino de Jorge Lorenzo, quien durante 9 años pilotó la M1 en la categoría de MotoGP y obtuvo destacados éxitos, como la conquista de los títulos correspondientes a las temporadas de 2010, 2012 y 2015, siendo el único corredor que logró arrebatarle un campeonato a la gran referencia de Repsol Honda, Marc Márquez.
El pentacampeón mallorquín se subirá ya a la moto a partir del Shakedown que se celebrará la próxima semana en el circuito de Sepang (Malasia), del 2 al 4 de febrero. Al mismo tiempo, también tendrá la oportunidad de participar en otros test oficiales de la IRTA, así como en algunas pruebas privadas que el equipo lleve a cabo este año con el objetivo de ayudar a los ingenieros de Yamaha en el desarrollo de la moto de 2020.
Lorenzo ha comunicado ya a sus seguidores este nuevo reto profesional a través de un mensaje en las redes sociales donde asegura sentirse "muy impaciente por empezar a trabajar duro con los ingenieros y poder dar toda mi experiencia al equipo para intentar conseguir otro campeonato del mundo".