La flemática BBC recoge una noticia mundana que en apenas unas horas ha dado la vuelta al mundo. Todo comenzó hace seis meses cuando los bomberos del cuartel de Dorset & Wiltshire acudieron a sofocar un incendio declarado en una granja. 60 toneladas de heno ardían y los bomberos consiguieron salvar a 18 lechones y a sus madres, dos cerdas.
Seis meses después la propietaria de la granja quiso reconocer el valeroso acto de los bomberos. La señora Rachel Rivers vio venir la tormenta y ya entonces pensó que “los vegetarianos me van a odiar por esto”. Los cerditos ya habían crecido y sido convertidos en salchichas con las que obsequió a los bomberos que dieron buena cuanta de ellas en una improvisada barbacoa en el patio del cuartel.
La cosa hubiera quedado ahí de no ser porque los bomberos colgaron en las redes sociales las fotos del festín con el siguiente texto: “hace exactamente seis meses y un mes salvamos a 18 cerditos de una granja de Milton y ahora recogemos los frutos de aquella noche de trabajo de febrero”.
Aunque los cerdos iban a acabar sus días como embutido pues la granja se dedica al suministro cárnico, asociaciones animalistas han cargado contra los bomberos que han retirado las fotografías de la barbacoa y han pedido disculpas. Con todo, un portavoz del cuerpo ha asegurado que "agradecemos a la granjera por su generosidad. No vamos a mentir, las salchichas estaban fantásticas".