Dark Souls 3, el último capítulo de esta saga, por fin está aquí, y OH TÍO, ha cumplido con todas mis expectativas. En mi opinión personal nos encontramos con un candidato a juego del año que se llevará todas mis altas apuestas.
En el año pasado, con Bloodborne, la empresa From Software mostró el gran potencial de la franquicia en la nueva generación. Pero han demostrado ser capaces de superar ese potencial en Dark Souls 3, así convirtiéndose en posiblemente uno de los mejores Souls jamás hechos.
En su momento deducimos que Dark Souls 3 podría ser jugado por sí solo, pero sería una experiencia muchísimo más completa si juegas a este juego tras haber jugado al primer Dark Souls. Pues bien, pasa y resulta que Dark Souls 3 es una secuela en su totalidad, así que haber jugado al 1 antes del 3 no es solo muy recomendable, sino incluso obligatorio. Ya que es muy posible que no comprendas por qué pasan ciertas cosas o a qué personajes pueden estarse refiriendo en un momento.
Por lo que sí. Ésta va a ser una reseña repleta de comparaciones con los anteriores juegos en donde no pararemos de decir "tal esto hizo tal que otro y tal y tal y tal" y tal que así.
Como sospechábamos en un principio, Dark Souls 3 mantiene la jugabilidad de Dark Souls 1 pero añade la velocidad y la agresividad de Bloodborne, la jugabilidad del 3 es increíblemente dinámica y con un ritmo muy avivado. Básicamente éste es un Dark Souls totalmente dopado y la adrenalina está más que garantizada.
Con respecto a Dark Souls 2 , siempre insisto en que es un buen juego o incluso un juego sobresaliente a su modo, pero podríamos decir que Dark Souls 3 corrige muchos problemas que el anterior tenía.
En Dark Souls 2 por ejemplo muchos jefes se sentían demasiado similares y repetitivos, en Dark Souls 3 en cambio tenemos un repertorio de jefes que aun siendo menor siguen siendo mucho más emocionantes, variados e interesantes. En comparación al 2, en Dark Souls 3 también tenemos más personajes con sus propios arcos de aventura, unos escenarios más fascinantes y una historia mucho más enlazada al primer Dark Souls. También cabe decir que cierta dificultad "trolleo" que predominaba un poco en el 2 ya no está presente, en el 3 ya tenemos una dificultad más auténtica y justa que mantiene la experiencia del juego excitante.
Añadiendo otro balance más, Dark Souls 1 sigue teniendo mejor historia que Dark Souls 3, pero aun así lo genial del 3 es que te muestra qué pasó con todos los personajes, jefes y lugares del primer juego. Dark Souls 2 no hizo mal en crear su propia mitología y su propio mundo por encima, pero es maravilloso ver que Dark Souls 3 se siente mucho más como una auténtica secuela del juego original que explica que ocurrió después de los acontecimientos del juego original.
El mundo de este juego se mantiene familiar y nuevo al mismo tiempo, tenemos lugares nuevos y gente nueva con la que interactuar, pero al mismo tiempo tenemos herramientas y personajes que están de vuelta para ayudarnos. Disponemos de toda clase de armas y armadura, algunas emigrando de juegos pasados y otras completamente nuevas.
Como hemos mencionado antes, los jefes son totalmente brutales, algunos son incluso épicos. Manteniendo la mecánica de Bloodborne, estos jefes disponen de "fases" que se irán activando conforme su salud baje, así ofreciendo un nuevo patrón de ataque y haciendo las peleas con éstos muchísimo más intensas y menos cansinas y aburridas.
Y no quiero spoilearos nada, pero el jefe final es el mejor jefe final desde el Senador Armstrong de Metal Gear Rising, es decir, para mí es uno de los mejores jefes finales con los que he luchado en videojuego alguno. De hecho, los veteranos de la saga Souls se van a quedar muy sorprendidos con este jefe.
Por último, cabe decir que la banda sonora tiene una nota de un millón sobre 10, es realmente buenísima. Como todos los juegos de la franquicia el juego se mantiene sin música, pero no solo la música de los jefes y los pocos temas ambientales no decepcionan en absoluto, sino que también bebe de Bloodborne el hecho de preparar sonidos ambientales que nos mantienen muy alerta.
Lo que amo de Dark Souls 3 es que recoge todo lo bueno de todos los juegos anteriores, el tono de Dark Souls 1, las mecánicas actuales del Dark Souls 2, el diseño de nivel de Demon's Souls, el mencionado dinamismo de Bloodborne, es una combinación perfecta de todo para crear el juego definitivo de From Software. Si eres fan de los Souls, te recomiendo que disfrutes de este título al máximo, ya que éste es el Grand Finale.
Éste es el destino de la franquicia, la oscuridad por fin ha llegado, pero aún quedan ascuas brillando. Éste es el último juego y es triste verlo marchar, pero Dark Souls va a pasar a la historia como uno de los nuevos clásicos del mundo de los videojuegos.
Muchas gracias a Hidetaka Miyazaki por brindarnos con ascuas esta magnífica saga.
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