Los amarillos tuvieron la posesión y disfrutaron de claras ocasiones, pero decide el acierto ofensivo del Atlético de Madrid.
Visita del líder al Estadio de Gran Canaria y ambientazo de gala. Quique Setién apostó por la inclusión de Willian José en el once inicial, dejando en el banquillo a Sergio Araujo.
El entrenador dio galones de titular al punta brasileño, buscando el revulsivo desde el banquillo de 'El Chino'. El capitán David García ocupó el puesto en el lateral derecho que dejó vacante David Simón, por sanción. Las Palmas comenzó con determinación, intentando ser fiel a su juego y controlar la posesión del balón, pero el Atlético atacaba en tromba.
La primera ocasión fue de Griezzman que habilitó a Vietto, Javi Varas abortó el peligro, minuto 6. Transcurría el minuto 10 con igualdad en el juego, las diferencias clasificatorias no se apreciaban sobre el terreno de juego. Corría el minuto 11 cuando Oblak detenía un disparo a bocajarro de Tana tras pase de Nabil El Zhar.
En la continuación de la jugada, de nuevo el guardameta colchonero evitaba el gol amarillo, tras rechazar un disparo envenenado de Dani Castellano. Así se llegó al cuarto de hora de partido.
En el minuto 17 Filipe Luis aprovechaba un balón que recibió escorado para cruzar ante Javi Varas, que nada pudo hacer ante el disparo del lateral internacional brasileño.
Palo al amarillo cuando mejor jugaba Las Palmas, que, sin embargo, no le perdió la cara al partido y buscaba el empate con determinació, imprimiendo velocidad en las acciones con Tana, Jonathan Viera y El Zhar.
Se cumplía la media hora de juego y Las Palmas dominaba el balón y elaboraba bien las jugadas, ante el todoperoso conjunto de Simeone. Un buen centro de Roque a punto estuvo de cazarlo David García dentro del área pequeña. De nuevo Dani Castellano hizo volar a Oblak. Dominio amarillo que ponía al Atlético contra las cuerdas.
Las Palmas acumulaba méritos para empatar el partido, pero el gol no llegaba. Con ventaja mínima para el Atlético llegó el intermedio. Las ilusiones locales permanecián intactas. Javi Varas evitó al comienzo de la segunda parte que el galo Griezzman noqueara a la UD. El guardameta sevillano aguantó bien en el mano a mano.
Quique Setién empezó a preparar los cambios. El primero de ellos, Wakaso por El Zhar. Ovación cerrada a Wakaso, el héroe de la Copa ante el Éibar. Roque tuvo el gol del empate en el 67, pero el balón se fue al lateral de la red y en la contra siguiente Griezzman marcaba el (0-2).
En esta ocasión el fútbol fue injusto con la UD. El partido se ponía muy cuesta arriba y la UD se veía obligada a apelar a la épica, al menos para intentar empatar el partido ante un equipo que sólo había encajado ocho goles en toda la competición.
Araujo entró al terreno de juego intentando dar un giro a una situación que se tornó muy complicada. El público reclamó un penalti por manos dentro del área del Atlético. Una jugada muy protestada por la grada insular, por momentos, encendida por el colegiado.
La fatiga hizo acto de aparición en el cuadro grancanario en los últimos miutos del partido. Con el partido ya resuelto llegó el tercero de Griezzman para redondear un resultado demasiado abultado para lo visto sobre el terreno de juego.
Si (
No(
