Una nueva tripulación viajará a la Estación Espacial Internacional (ISS) en septiembre, haciendo el relevo habitual que, cada 3 meses, se vive en este módulo orbital. Sin embargo, los miembros de esta nueva misión aún no están cerrados. Hay una plaza libre. Este vacío no es habitual en los planes de la NASA, la Agencia Espacial Europea (ESA) y la agencia rusa Roscosmos, que eligen y entrenan a los futuros miembros de la ISS con meses de antelación.
El problema con la tripulación que debe viajar en septiembre es consecuencia de la ‘deserción’ de la soprano inglesa Sarah Brightman. Esta cantante había pagado un billete a la órbita terrestre con la compañía ‘Space Adventures’ y tenía previto convivir en la ISS como una astronauta más. Finalmente, hace un mes, decidió terminar con esta aventura, para la que llevaba preparándose desde 2012, por “problemas familiares”, según anunció ella misma en su página web. Brightman ha mostrado en las redes sociales su entusiasmo en visitar el espacio este año.
Ha compartido con sus seguidores fotos de sus entrenamientos en la NASA y en Rusia y ha ofrecido varias ruedas de prensa explicando su experiencia. Es por ello que muchos han visto en esta ‘retirada’ una campaña publicitaria para su carrera musical. Ahora, la compañía ‘Space Adventures’ debe buscar un sustituto para la soprano entre sus clientes y ya se ha hablado de un publicista japonés como futuro tripulante de la ISS: Satoshi Takamatsu.
Sin embargo, la empresa de turismo espacial aún no ha hecho un anuncio oficial. Así, el equipo de astronautas para la próxima expedición a la ISS sigue sin estar completo, a la espera de que Takamatsu se decida, o que las agencias espaciales aplacen la visita turística para otro momento y decidan completar la tripulación ellas mismas con uno de sus astronautas.