NC critica que la primera decisión fiscal de Clavijo fracasa en el objetivo de reducir la renuncia a herencias y supone la pérdida de 45 millones de ingresos públicos.
La diputada de Nueva Canarias-Bloque Canarista (NC-BC) Esther González, dice que el “tiempo nos da la razón” ya que se confirma que la eliminación del impuesto de Sucesiones y Donaciones fue un “regalo para los más ricos” de Canarias. La portavoz parlamentaria en materia tributaria del grupo canarista criticó que la primera decisión fiscal del Gobierno presidido por Fernando Clavijo fracasa en su objetivo de reducir la renuncia a herencias en las islas. González mantuvo que el Consejo General del Notariado (CGN) corrobora lo contrario, los desistimientos aumentan, se sitúan por encima de la media estatal y de territorios más ricos, como Madrid y Euskadi. La portavoz canarista reprochó una pérdida de ingresos públicos de 45 millones de euros este año.
Según los datos del Consejo General del Notariado (CGN), publicados el pasado 6 de marzo, la renuncia a herencias en Canarias va en aumento, según Esther González. Incluso es mayor que en otras comunidades, donde sí se paga el tributo.
El pasado año, 2.123 herencias fueron rechazadas en el Archipiélago, un 17,84 por ciento del total de legados, superior a la media estatal (15,80 por ciento), expuso la portavoz de NC-BC. Incluso, agregó, Canarias cuenta con un porcentaje mayor de desistimientos que la Comunidad de Madrid (14,02 por ciento) y Euskadi (10,37 por ciento).
“Si hay una cosa que queda clara” es que la bonificación del 99,99 por ciento del impuesto, primera medida fiscal aprobada en la legislatura por el Ejecutivo de CC y el PP a medidos de septiembre de 2023, “no ha frenado” la renuncia a herencias, “una de las razones por las que el gabinete de Clavijo determinó la necesidad” de esa bonificación; criticó Esther González.
“Lo advertimos desde el primer día, esta medida no tenía nada que ver con aliviar la situación de las familias canarias, y todo que ver con regalar beneficios fiscales a quienes más tienen”, denunció. “Hoy los datos lo confirman, que se suprimió el impuesto y las renuncias a herencias no han bajado, sino que han subido”.
El propio CGN, añadió, insiste en que el problema de fondo no era el tributo, sino el elevado coste económico y burocrático de su aceptación, especialmente las que incluyen deudas, inmuebles deteriorados o cargas fiscales asociadas. González mantuvo que los legados que son un problema para las familias “no son las grandes (herencias) sino las que implican deudas y demás costes derivados elevados imposibles o difíciles de afrontar”. Esta supresión fiscal fue un “regalo para una minoría rica, no una solución” para la mayoría de las familias canarias, censuró.
Se confirma una vez más, para NC-BC, que el Ejecutivo de Clavijo gobierna de “espaldas” a la realidad social del Archipiélago. Se eliminaron millones de euros en ingresos públicos, solo en 2025 serán del orden de 44,7 millones de euros que podían haberse invertido en vivienda pública, servicios sociales o ayudas a familias para beneficiar “únicamente a una minoría de grandes herederos”, reprochó González.
Lo más reprobable, según la parlamentaria, es que Canarias es la comunidad donde más desigualdad existe en las rentas y en la riqueza. Solo el 10 por ciento de los hogares más ricos acumulan el 20 por ciento de la riqueza mientras que el 50 por ciento más pobre sólo acumula el 2,3 por ciento de esa riqueza, subrayó en base a las conclusiones del estudio La desigualdad en riqueza en Canarias de la Universidad de La Laguna, primer estudio del Archipiélago que mide la desigualdad de la riqueza y que abarcó desde 2016 a 2019.
NC-BC exige al Ejecutivo de las dos derechas canarias la inmediata evaluación del impacto real de esta medida y la adopción de una política fiscal “justa y progresiva”, que proteja a las herencias familiares de pequeño y mediano valor y establezca mecanismos para gravar de forma adecuada las grandes fortunas.
Recordó Esther González que el impuesto de Sucesiones y Donaciones ya estaba bonificado, por decisión del pacto de progreso en la pasada legislatura, al 99,9 por ciento para las herencias de hasta 340.00 euros por heredero. A partir de esa cantidad, el descuento disminuía progresivamente hasta las herencias por importe de 1.240.000 euros, que carecían de bonificación, defendió la portavoz de NC-BC.