Noboa gana las elecciones en Ecuador. La opositora Luisa González, denuncia fraude electoral. Lo cierto es que desde su exilio Correa ha hablado de su apoyo a la dictadura venezolana y esto le desautoriza a la hora de hacer comparaciones. Todos se acusan de hacer trampas estableciendo que las cosas en América son de forma diferente. Todavía es pronto para saber si el nuevo mandatario será reconocido por la izquierda internacional o se verá sometido a las críticas inservibles que sufrió Maduro tras su fraude electoral a la vista de todos. Ayuso acudió a la campaña con su eslogan socialismo o libertad y puede ser que aquí aprovechen para decir que ha ganado el enemigo. No sé qué ocurrirá en la toma de posesión del nuevo presidente, si le harán un Milei o enviarán a un subsecretario acompañando al rey Felipe VI. Estas cuestiones están aún por despejar. Cuando hagamos la lectura del voto exterior sabremos cuántos ecuatorianos votaron desde España y en qué sentido lo hicieron.
La foto ya está hecha desde aquí: Noboa es hijo del hombre más rico del país y Luisa González representa a las simpatías por el chavismo. Es difícil decidirse en medio de tanta polarización. Sería como elegir entre Trump y Maduro, pero lo cierto es que, tanto en Ecuador, como en Nueva York o Madrid, hay gente que no piensa de una forma o de la otra y son mayoría. A mí realmente me importa poco quien gane el relato. No me influye. Confío en las personas y quiero pensar que vivimos engañados por un espejismo que nos presenta las cosas al revés de como son. Es difícil descubrir dónde se encuentra la realidad en un ambiente sometido a la manipulación permanente.
Hoy, por ejemplo, el sondeo de 40DB para El País y Cinco días habla del descontento de la gente y su falta de credibilidad en la bonanza económica. No todo va como un cohete y temen por la vivienda y por el empleo, dos realidades que el optimismo de las promesas no pueden esconder. El problema se resolverá con las soluciones aportadas por Revilla en la Sexta. Cuando las cosas se recrudecen sale el cántabro con las verdades del barquero de San Vicente de la Barquera. La gente se queda encantada con los cantamañanas y les envía dinero para que paguen las multas que les impongan por lenguaraces.
Somos herederos de Encarna de Noche o de la hucha del dómund en un país se confunde a la solidaridad con una colecta o una merienda benéfica. Mientras tanto dispondremos de otro debate para distraernos: Noboa o González. ¿Dónde están las esencias para identificarnos ideológicamente? Ahora, dada la coyuntura internacional, resucitamos a Felipe González con su proverbio chino. Lo importante del gato es que cace ratones. Algunos se están dando cuenta de que no es tan malo como dicen, ni tan viejo ni tan imbécil.