Queridísimo pueblo de Taganana, aunque muchas veces los excrementos de tórtolas que cubren mi placa, no me permiten ver bien todo lo que sucede en la plaza de este querido rincón de Anaga; intento no perder detalle. Así, el pasado día 14 de mayo, he sentido como un grupo de personas se congregaba a la salida de la Iglesia para conmemorar los ¡quinientos veintidós! años de la fundación del Pueblo de Taganana. Ya sé que ahora, alguien se empeña en dejar claro que sólo somos un barrio de la capital isleña; pero en lo que a mí concierne, seguimos siendo un pueblo con su dignidad intacta. Las palabras vertidas en este acto, su izado de bandera y la presencia activa de un grupo de milicianos, deja claro que nuestra existencia no podría pasar desapercibida.
Son muchas las personas que trabajan duro para que Taganana siga siendo una muralla formada por montañas por donde cualquier enemigo de las islas, no se atreverá a entrar. Aún hoy, se recuerda el papel que desempeñó la gente que vivía en este reducto rodeado de peñas. Sus caprichosas y abruptas formas dejan, bien cimentado, el carácter de la gente que allí vivíamos y sigue viviendo.
El próximo mes de julio, se llevará cabo una representación popular de la gesta en la que se participó para echar a quien se atrevía a amedrentar, al pueblo tinerfeño, con sus barcos, soldadesca y cañones. Mediante un guion creado y dirigido por Don. Julio M. Rodríguez de Castro y promovido por la Asociación de Vecinos Voz del Valle de Taganana -espero acertar con el nombre- y con la colaboración activa de la Milicia de La Gesta del 25 de julio y la de Taganana, se podrá revivir ese hito en el que se evitó que esta isla cambiara de reino.
Desde estas líneas y valiéndome de quien me representará en ese acto de teatro popular, me van a permitir que invite a su participación a toda aquella persona que muestre interés por la cultura en general y por la de Tenerife en particular. En dicho acto, el autor del guion arriba mencionado, conseguirá -el año pasado ya lo logró- que los asistentes viajen por la historia que rodeó a lo acontecido en la ciudad de Santa Cruz de Tenerife que, por aquel entonces -1797-, era el puerto de la capital de la isla constituida en San Cristóbal de La Laguna. La gente que allí se reúna, podrá seguir los acontecimientos que se desarrollaron por las milicias que tuve a bien liderar por mi deber como máximo exponente de la autoridad civil en la zona de Anaga.
Como fui testigo desde la plaza de Taganana del buen trabajo realizado en 2022, me gustaría hacer partícipe, para este año, a una serie de personas y personalidades que considero que no deberían perderse esta rememoración.
Para empezar, creo necesario que toda la población de Taganana, la residente y la que se encuentra viviendo fuera de sus límites, se acercara a sus orígenes para conocer y/o revivir, aún más si cabe, lo que aconteció en aquellas dramáticas fechas. El volver a recorrer sus calles y participar activamente en ese día de celebración popular, seguramente les hará sentir en sus venas los mismos latidos que tuvimos cuando regresamos, todos sanos, quienes de allí partimos para defender lo que se nos quería arrebatar.
También me gustaría invitar a las agencias de viaje que trabajan con el Turismo que nos visita, para que organicen una visita a este mágico lugar de Tenerife, y de camino, ofrezcan a su clientela un día de cultura y atractiva representación de su pueblo. Merecerá la pena y casi seguro recibirán felicitaciones de quienes se apunten a ocupar las plazas que ofrezcan.
El invitar a las autoridades es algo que hago con sumo gusto, y además, la hago extensiva, a las de la isla entera a través de su Cabildo. Y como lo acontecido por este puñado de valientes que me acompañaron en la aventura, tuvo sus consecuencias positivas para todas las islas Canarias y para el mismísimo Estado, no me gustaría que alguien pudiera excusar su presencia por algo tan socorrido como el no haber recibido su invitación. Así que Excmo. Señor Presidente de Canarias -Quien esté al recibo de esta misiva, o quien haya recogido el testigo si fuera menester-; Ilmo. Señor Presidente del Excmo. Cabildo Insular; Señores Alcaldes de Santa Cruz de Tenerife, de San Cristóbal de La Laguna y de cada uno de los Ayuntamientos de la isla de Tenerife; y, por qué no, a Usted También, Excmo. Señor Presidente del Gobierno de España. Al fin y al cabo, lo que se defendió en las calles de la Muy Noble, Leal, Invicta y Benéfica, Ciudad Puerto y Plaza de Santa Cruz de Santiago de Tenerife, por el General Gutiérrez a quien los Milicianos de Taganana, apoyamos con todas nuestras fuerzas, tuvo trascendencia para toda la Nación. Desde esta invitación, les pongo en bandeja de plata, el ofrecer un reconocimiento a los descendientes de aquellos bravos hombres. A Todos Ustedes que hoy desempeñan cargos para los distintos estamentos políticos del reino de España, les invito a disfrutar de un acto cultural en plena naturaleza. Sería, obviamente una obligación placentera contar, también, con el Mando militar de Canarias. Cuando a mí, y a mi gente se nos llamó, acudimos sin dudarlo. ¡Queda pues, hecha la convocatoria!
Puestos a invitar, ¿por qué no dar la oportunidad, a las autoridades eclesiásticas? El venir, les dará la oportunidad de presentar sus respetos ante el busto del párroco D. Isidoro Cantero Andrada (escultura de D. Eladio González de La Cruz), quien estuvo sesenta y dos años llevando su buen hacer -hizo mucho por el pueblo- y seguramente, Excmo. y Rvdmo. Sr. Obispo, él estará encantado de saludarle, aunque sea desde la mirada fría del bronce. Al mismo tiempo, acompañará al Rvdo. Padre Silvestre Gorrín quien, seguro, participará como un tagananero más en el acto donde se manifiesta el arrojo demostrado frente a un enemigo con superioridad numérica y de medios. ¿Quién sabe? Sin la participación activa de estos milicianos que ahora conmemoran el "Toque a Rebato", tal vez, en lugar de un obispado católico, hubiéramos tenido el correspondiente de una Iglesia Anglicana.
Para terminar con estas invitaciones, me gustaría se invitara al Señor Barack Obama. Bríndenle la posibilidad de conocer algo más del lugar, de cuyas laderas, provienen las uvas del vino que tanto le gusta. Veredas por las que, en su momento, tuvimos que subir quienes nos encaminamos hacia La Fortaleza para reunirnos con el resto de las Milicias. Si acepta la invitación, anímenle a tocar la placa que está a mi nombre. Tal vez sienta la energía que nos llevó a enfrentarnos a las huestes lideradas por el Almirante Horacio Nelson.
Confiando en sentir la presencia de quienes deseen apoyar el trabajo que llevarán a cabo quienes representarán los roles de las personas que tuvimos que vivir el acontecimiento en julio de 1797, les queda, atentamente.
Andrés Perdomo Álvarez y en su nombre, quien firma este escrito.
Si todo va bien, se les espera el sábado 15 de julio de 2023, a las 18:00 horas, en La Plaza del pueblo de Taganana -Anaga- Santa Cruz de Tenerife.