El Ayuntamiento de Santa Cruz, a través del área de Acción Social que dirige Rosario González, visitó ayer una de las actividades del proyecto Con-Sentido, en el parque de La Granja, donde unas 15 familias, acompañadas de sus familiares con algún tipo de discapacidad, pusieron en común su agradecimiento por esta iniciativa y sus demandas a la concejala, que afirmó que “se han ido ampliando los equipos destinados al área de Discapacidad del Instituto Municipal de Atención Social (IMAS) para llegar más y mejor a las necesidades particulares que demandan las familias de personas con discapacidad”.
Este programa de mediación familiar y social, destinado no solo a las personas con discapacidad, sino también a sus familiares, se inició desde el pasado mes de enero con la finalidad de hacer frente a las consecuencias derivadas de la pandemia de la COVID-19, “por lo que se ha venido desarrollando por los cinco distritos del municipio y ha tenido lugar tanto en el domicilio de las personas afectadas como fuera de este, conforme a las necesidades de cada una de las familias usuarias de este proyecto”, aclara González.
La concejala responsable del IMAS indica que este programa “pretende dar continuidad a otras acciones que hemos desarrollado durante los últimos meses y con las que damos respuesta específica a las múltiples problemáticas que se generan en el ámbito de las personas con discapacidad” y añade que “tras los efectos de la pandemia, se ha producido un gran cambio, casi siempre con consecuencias negativas, para la vida de las personas con discapacidad y sus familias”.
Para corregir estas situaciones, el IMAS, junto a la Asociación Factoría Social, puso en marcha el proyecto Con-Sentido, que cuenta con un equipo técnico especializado en la atención individual y familiar de las personas con algún tipo de discapacidad, desarrollando estrategias de escucha activa y nuevas formas de comunicación para generar un vínculo más constructivo en las relaciones intrafamiliares, sociales y comunitarias. “Se trata de prevenir la cronificación de situaciones negativas y tener de herramientas que eviten el agotamiento y cansancio de las familias cuidadoras de personas con discapacidad”, concreta.
Hay que recordar que el nombre del proyecto Con-Sentido obedece a que ambas partes, tanto las personas con discapacidad como sus familiares cuidadores, aceptan la mediación que se les ofrece de manera voluntaria y consentida. También hace referencia al proceso fisiológico que supone la recepción de los estímulos que se producen a través de la vista, el oído, el tacto, el gusto y el olfato.