Los jueces del tribunal londinense consideran que Becker ocultó una propiedad en su localidad natal, Leimen, transfirió sin permiso sumas elevadas de dinero a otras cuentas, y no declaró su participación en una empresa de inteligencia artificial, además de una deuda concerniente a un préstamo.
La acusación entiende probado que Becker escondió deliberadamente datos sobre numerosas propiedades y que echó la culpa de la situación a los asesores que supuestamente se ocupaban de sus finanzas. La defensa, aun reconociendo la "ingenuidad" de su cliente, ha sostenido durante el proceso que Becker es inocente de los cargos que se le imputan. El jurado ha aceptado esta argumentación en 20 de los 24 puntos presentados por la Fiscalía.
DECLARADO INSOLVENTE EN 2017
Boris Becker, de 54 años de edad y residente en Londres, fue declarado insolvente por un tribunal el 21 de junio de 2017. Tras ello, tuvo que declarar todo su patrimonio a un administrador concursal. El alemán ganó durante su carrera unos 25 millones de dólares en premios y, según sus propias estimaciones, una suma similar en ingresos publicitarios.
Sin embargo, comenzó a tener problemas financieros que atribuyó, entre otras razones, al costoso divorcio de su exesposa, así como a los gastos de manutención de su hija, Anna Ermakova.
El extenista, que comenta torneos para diversas cadenas televisivas, entre ellas la BBC londinense, ha acudido al tribunal junto a su actual pareja, Lilian De Carvalho Monteiro, y su hijo mayor, Noah.