La cubierta quedó totalmente derrumbada tras ser pasto de las llamas. La emblemática aguja que adornaba la Catedral, obra cumbre del gótico construida entre los siglos XII y XIV, cayó en llamas a causa del gran incendio.
El fuego se avistó por primera vez en la parte de la cubierta de la cabecera, sobre el deambulatorio, en torno a las 18:50 horas de la tarde de ese lunes. Una hora después se derrumbó la aguja y posteriormente todo el techado de la catedral.
Las fuerzas de seguridad establecieron un perímetro de seguridad en torno a la catedral y desalojaron los puentes que comunican la isla de la Cité donde está el templo con el resto de la ciudad.
Tres años después del incendio que la devastó, la catedral de Notre Dame de París ha recuperado su blancura original gracias al trabajo diario de un ejército de artesanos y se espera que pueda reabrir sus puertas en 2024.
En su día, tras el incendio de 2019, el presidente francés, Emmanuel Macron, en un discurso solemne a la nación, dijo que confiaba en que se pueda reconstruir la incendiada catedral en tan sólo 5 años, un plazo del que dudaron inmediatamente expertos y gran parte de los propios franceses. Ahora sí se cree que estará lista para 2024.
La catedral de Nuestra Señora (Notre-Dame) de París es una catedral católica, sede de la archidiócesis de París. Se trata de uno de los edificios más señeros y antiguos de cuantos se construyeron en estilo gótico.
Se empezó su edificación en el año 1163 y se terminó en el año 1345. Dedicada a la virgen María, se sitúa en la pequeña isla de la Ciudad, rodeada por las aguas del río Sena.
Es uno de los monumentos más populares de la capital francesa y la catedral más popular de toda Europa, siendo también la más visitada del continente.
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