Nepal ha sufrido un seísmo de 7,5 grados en la escala de Richter, según el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS), que ha dejado más de 600 muertos, decenas de heridos, daños importantes en Katmandú y aún indeterminados en otras partes del país.
En varias zonas de la capital nepalí se han producido derrumbes de edificios, particularmente antiguos, incluidos templos y monumentos, y miles de personas se encuentra en las calles ante el riesgo de que las edificaciones colapsen.