‘Memorias de contrabando’ es el título de una exposición acompañada de otras actividades paralelas, que sirve de presentación a unas jornadas sobre Memoria Histórica en Canarias, tras cumplirse 75 años del fin de la Guerra Civil. La inauguración oficial tendrá lugar a las 20:30 horas de mañana viernes en el Centro de Arte La Recova y la muestra podrá visitarse hasta el próximo 2 de noviembre, contando con actividades semanales durante todo el mes de octubre.
En la mañana de hoy jueves se celebró un acto previo de presentación a los medios informativos en el que estuvo presente el alcalde de la ciudad, José Manuel Bermúdez. Durante el mismo, Bermúdez resaltó la calidad de las creaciones artísticas que se exhiben y que sirven para recuperar lo que nunca se debió perder, “porque el olvido de la represión, forma parte de la propia represión”.
El alcalde estuvo en el acto de hoy junto al primer teniente de alcalde, José Angel Martín Bethencourt; la tercera teniente de alcalde y presidenta del Organismo Autónomo de Cultura (OAC), Clara Segura; el consejero de Presidencia del Gobierno de Canarias, Francisco Hernández Spínola; el consejero de Cultura del Cabildo de Tenerife, Cristóbal de la Rosa; el director de Relaciones Institucionales de la Fundación CajaCanarias, Alberto Luaces; y la presidenta de la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica de Tenerife, Mercedes Pérez Schwartz;
Los comisarios de la muestra, Dailo Barco y Alexis W., informaron de los pormenores de esta exposición colectiva y explicaron detalladamente algunas de las obras que forman parte de la misma. Francisco Hernández Spínola y Cristóbal de la Rosa se refirieron, por su parte, a la necesidad de seguir apoyando el desarrollo de la Ley de Memoria Histórica, mientras que Mercedes Pérez Schwartz resaltó las dos vertientes de esta exposición: la artística, por un lado, y la de justicia y libertad, por otro.
A través de la mirada de artistas de diferentes generaciones, la exposición pretende crear un espacio para la reflexión sobre las repercusiones de un período histórico que incluye la guerra civil española, la dictadura y la transición, en las islas y desde ellas. Desde el movimiento surrealista hasta la actualidad, el mundo artístico, intelectual y cultural de Canarias se ha aproximado al horror de la guerra, la represión y el exilio, utilizando una gran variedad de lenguajes y con independencia del contexto histórico vivido. Nombres clave de la historia del arte en Canarias como Óscar Domínguez, Juan Ismael, Manolo Millares o Tony Gallardo se fusionan con jóvenes creadores como Marco Alom, Daniel de la Guardia o Federico García Trujillo.
La edil Clara Segura resaltó que la muestra puede calificarse de histórica, ya que es la primera vez que en Canarias se organiza una exposición eminentemente artística en torno a este tema, sin olvidar todas las connotaciones históricas en las que se basa. Un trabajo de arqueología del arte desde diversos soportes: pintura, fotografía, escultura, bibliografía, poesía o cine, entre otros.
Con esta selección, se propone el ejercicio de recordar para reescribir la historia oficial, pero desde una sensibilidad artística. La selección de obras que muestra la exposición se fundamenta en dos criterios: por un lado, se parte de una investigación sobre los artistas que vivieron el contexto histórico en primera persona para trazar las líneas que convergen hacia nuestro presente y que recogen el trabajo y compromiso de las generaciones siguientes. Por otra parte, la exposición incluye piezas de artistas contemporáneos que han sido invitados a desarrollar una propuesta estética y conceptual sobre la represión. La mezcla de ambos criterios quiere interpretar la historia a través de un montaje no cronológico, sino transversal y heterogéneo. El objetivo es ofrecer una exposición colectiva, histórica y multidisciplinar, que genere múltiples resonancias entre pasado y presente, desde lo figurativo a lo abstracto, desde lo dramático a lo documental, para imaginar unos hechos silenciados.
La exposición, comisariada por Alexis W y Dailo Barco Machado, se ha hecho posible gracias al Organismo Autónomo de Cultura (OAC) del Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, que preside la tercera teniente de alcalde Clara Segura; contando con la colaboración de las viceconsejerías de Justicia y de Cultura del Gobierno de Canarias, el Cabildo de Tenerife, la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica de Tenerife, la Fundación CajaCanarias , la Fundación Negrín, la Fundación Pedro García Cabrera, TEA–Tenerife Espacio de las Artes, la Universidad de La Laguna, la Filmoteca Canaria, el Archivo Histórico Provincial, la Biblioteca Municipal de Santa Cruz de Tenerife y las salas Conca y Saro León.
El proyecto ‘Memorias de contrabando’ consta de cuatro bloques que se complementan:
-La selección de obra plástica expuesta en la sala principal del Centro de Arte La Recova es la pieza central del proyecto. Pretende mostrar el trabajo de artistas de generaciones diferentes. Hacer ver un episodio de nuestra historia oscurecido por el paso del tiempo y cómo (no) se mantiene en el imaginario colectivo.
-La programación audiovisual, proyectada en la sala anexa del Centro de Arte La Recova, complementa la muestra con obras de diferente estilo: películas que testimonian la vida en las islas durante la II República, documentales que recogen las memorias de los protagonistas de la represión y la reflexión de los investigadores, que recuerdan la vorágine posterior al Golpe de Estado de 1936 y sus secuelas.
-Las actividades paralelas a la exposición tienen el objetivo de crear un espacio de encuentro para la reflexión en torno a la Memoria Histórica, articulado desde otras perspectivas. Presentaciones, conferencias y mesas redondas, suman contenidos para el espectador que quiera profundizar en el conocimiento de los hechos que aborda Memorias de contrabando.
-En el año 2015 se publicará un libro-catálogo que será el compendio del trabajo de investigación realizado para llevar a cabo este proyecto, ampliando las referencias. Una manera de crear legado para generar memoria. Este proyecto se concibe como una herramienta para generar memoria, invitando a la sociedad canaria a sensibilizarse con hechos de su historia reciente, injustamente relegados al olvido. Si se considera que el olvido de la represión forma también parte de la represión, el testigo de la memoria se revela como una necesidad transferible de generación en generación. Una memoria de contrabando.