Juventud por el Clima Tenerife se suma a la convocatoria mundial de movilizaciones en reivindicación de una mayor acción climática con una manifestación el 24 de septiembre y cuyo recorrido tendrá inicio en la Plaza Weyler.
La lucha climática en Tenerife renueva su andadura el próximo viernes 24 a las 18:00 en una manifestación que tiene como objetivo volver a colocar la emergencia climática en el centro del debate público. Otras crisis han tomado, comprensiblemente, prioridad debido a la necesidad de tomar decisiones con urgencia e inmediatez, dejando en segundo plano todo lo demás. Algo que hemos podido aprender en 2020 es que existen amenazas que se perciben como lejanas pero que se pueden tornar completamente disruptivas para la vida de todas las personas en pocas semanas. La Crisis Climática es, al igual que la pandemia de la COVID-19, una crisis para la que nuestra capacidad de adaptación será mínima si posponemos la toma de deciciones críticas hasta que sintamos sus peores efectos.
Una de las particularidades de la Crisis Climática es que existe un vasto consenso en la comunidad científica sobre la necesidad de realizar “reducciones inmediatas, rápidas y a gran escala de las emisiones de GEI […]” para poder seguir aspirando a un calentamiento inferior a 1,5Cº, límite al que nos hemos comprometido en el Acuerdo de París. Además de esto, el IPCC afirmaba en el último informe, publicado el pasado 9 de agosto, que: “Es indiscutible que las actividades humanas estén provocando el cambio climático, haciendo que fenómenos extremos, como olas de calor, lluvias torrenciales y sequías, sean más frecuentes y graves”. La alarma de algunos de estos expertos mundiales en cambio climático los ha llevado a filtrar las principales conclusiones de los otros dos Grupos de Trabajo, preocupados por los posibles suavizados a los que suelen estar sujetos los Resúmenes para Representantes Políticos (con siglas en inglés SPM) de estos informes y la consecuente tibieza e ineficacia de las medidas que ya se han puesto en marcha.
En la convocatoria del próximo 24 se intentará poner de manifiesto que la crisis climática no existe en el vacío. Otras crisis socioeconómicas como el racismo, el sexismo, el capacitismo, la desigualdad de clase y otras, amplifican la crisis climática y viceversa. No se trata de una sola cuestión, las diferentes luchas y emancipaciones están conectadas y vinculadas entre sí. Se expondrá que aunque existe una unión entre las diferentes luchas por la justicia climática también es importante reconocer que no todo el mundo experimenta los mismos problemas, ni los experimenta en la misma medida. Los Pueblos y Áreas Más Afectadas (PAMA) están sufriendo los peores impactos de la crisis climática y tendrán grandes problemas para adaptarse a ella si no actuamos conjuntamente.
Es por ello que se llama a la comunidad educativa, a los colectivos y la sociedad en general a movilizarse y participar en la medida de las posibilidades de cada una, ya sea saliendo a la calle, tomándose el día para reflexionar o mostrando apoyo a través de las redes. Este llamamiento tiene intensión de decir alto y claro que necesitamos medidas ajustadas a la realidad, no se desea ni un desarrollo basado en la construcción de puertos como el Granadilla o el que se desea realizar en Fonsalía ni un desarrollo que entre en conflicto directo con la protección de la biodiversidad masificando los charcos que forman parte de los ecosistemas que sustentan la vida en las islas.
Por un desarrollo a escala humana que ponga la vida en el centro y en reclamo de procesos democráticos que nos permitan a la ciudadanía formar parte de los debates que conformarán el futuro del archipiélago. Por todo ello se realiza este llamamiento.