Fedex y Aceto niegan irregularidades con la aplicación del SMI
viernes 01 de marzo de 2019, 13:38h
El desacuerdo de algunos sindicatos hará que el mismo tenga que ser dirimido por la Justicia competente. Por lo que, hasta la fecha, no hay ninguna sentencia que ratifique la comisión de irregularidades
Desde la Federación de Exportadores Hortofrutícolas de la Provincia de Las Palmas, Fedex y la Asociación de Cosecheros Exportadores de Tomate de Tenerife, Aceto, frente a las graves acusaciones de estar cometiendo irregularidades, manifiestan que es absolutamente falso.
Bien es cierto que desde que se conoció la aprobación de la subida del SMI particularmente este sector, que es el que mayor mano de obra requiere, anunció a los trabajadores las enormes dificultades para hacer frente a este incremento salarial en torno a un 23%, habida cuenta de la imposibilidad de repercutir esta subida en el precio de venta del producto.
En relación al antiguo SMI y con el fin de favorecer mejoras salariales, se incluyeron una serie de complementos que incrementaban la cuantía a percibir. Al mismo tiempo, y en función de los resultados de la actividad, se acordó con los representantes sindicales llevar a cabo un incremento anual de los salarios.
Ante esta situación, las empresas del sector han realizado los incrementos salariales en aplicación del RD 28/2018 sobre el salario existente. El desacuerdo de algunos sindicatos hará que el mismo tenga que ser dirimido por la Justicia competente. Por lo que, hasta la fecha, no hay ninguna sentencia que ratifique la comisión de irregularidades.
Algunos sindicatos han apelado al aumento de las ayudas del POSEI y de la compensación al transporte al 100% para reivindicar mayores aumentos. Sin embargo, la realidad es bien distinta. A este respecto aclaramos que la compensación al transporte no es real que sea del 100%, por tres razones. Una, los envíos de la fruta no se realizan a la Península (donde se aplica el 100% de la compensación) sino que el destino final es Reino Unido y Continente con lo cual el transporte no está compensado al 100%.
Dos, entre el coste real del transporte a la Península y la compensación aplicada por Fomento hay conceptos de la factura que no son subvencionables, por lo que la compensación tampoco es del 100%. Y tres, el coste tipo aplicado fija el máximo a abonar independientemente del coste real lo que tampoco compensa el 100% del transporte.
A esto hay que añadir que la compensación al transporte de los envíos realizados entre enero y mayo de 2019 (período que comprende la segunda mitad de la zafra), serán abonados –siguiendo la resolución de las dos últimas campañas- en diciembre de 2020, por lo que los productores tienen que hacer frente a este coste durante casi 20 meses. El caso se agrava cuando se trata del transporte interinsular. A los productores de Fuerteventura aún se les adeuda la compensación de los años 2015, 2016, 2017, 2018 y lo que va de 2019.
En cuanto a las ayudas del POSEI, el incremento de las mismas ha venido determinado por el estudio de costes y el margen de rendimientos que realizó la Universidad de La Laguna por encargo del Gobierno de Canarias. Las conclusiones del mismo fueron rotundas para que, tanto por el Ministerio de Agricultura como por la Comisión Europea, se aprobara la ayuda máxima que permite Europa por Hectárea. Al estar fijado el tope en los 15.000 €/ha., no se pudo alcanzar los casi 20.000 €/ha. que refleja el informe.
Asimismo, recordamos que esta cantidad podrá ser percibida exclusivamente por aquellos productores que hayan presentado un plan de mejoras e inversiones y su cuota de exportación esté entre un 90% y un 100% de la producción de la campaña. El resto solo podrán percibir, si cumplen los requisitos, 11.000 €/ha.
A nadie se le escapa que en la última década la línea de costes y la de precios de venta han tomado trayectorias contrapuestas. Hoy en día los precios se mantienen prácticamente inalterables desde hace casi veinte años, mientras que los costes no han parado de incrementarse. Tal es la asfixia que ha provocado esta situación en el sector, que éste tuvo que renunciar a los barcos de campaña y sustituirlos por los de líneas regulares que no ofrecen las garantías necesarias para atender las necesidades de los clientes.
Por si fuera poco el escenario de desventajas, la incertidumbre del Brexit está provocando mucha inquietud y nerviosismo por una posible salida desordenada. El mercado del Reino Unido absorbe la mitad de nuestras producciones y, en caso de tener que abandonarlo, sería imposible recolocarlas en un mercado sobre abastecido y con competidores de terceros países como Marruecos, Turquía, Túnez y Egipto.
La Patronal considera que desde el Gobierno del Estado no se ha tenido en cuenta la situación de las empresas agrícolas a la hora de aprobar el RD. Apostamos por la mejora del SMI, pero en este caso tendría que haberse permitido el incremento de manera gradual.
Además, cuando en menos de tres años finalice la bonificación actual de la Seguridad Social en los almacenes de empaquetado, la casi totalidad de las empresas se verán abocadas a cesar la actividad.
La razón estriba en la imposibilidad de repercutir la subida del 23% del SMI en el precio de venta de los tomates y pepinos que vendemos a nuestros clientes. Al tener que obtener este incremento íntegramente de la ya negativa cuenta de resultados, la actividad dejará de ser rentable y estará condenada al cierre.