El Cabildo y el Gobierno trabajan ya para solucionar la problemática ambiental de La Graciosa
viernes 12 de junio de 2020, 12:00h
La presidenta del Cabildo y el viceconsejero para la Lucha contra el cambio climático del Ejecutivo Autonómico se comprometen “a saldar la deuda que se tiene con La Graciosa”
La presidenta del Cabildo de Lanzarote, María Dolores Corujo, y el viceconsejero para la Lucha contra el cambio climático del Gobierno de Canarias, Miguel Ángel Pérez, se desplazaron durante la jornada del miércoles a La Graciosa para conocer y analizar la realidad ambiental de la Octava Isla.
Acompañados por el consejero de Presidencia, Residuos, Actividades Clasificadas, Caza, Agua y Energías Eólicas de la Primera Institución insular, Andrés Stinga, y por la concejal delegada del ayuntamiento de Teguise en La Graciosa, Alicia Páez, Corujo y Pérez sostuvieron un encuentro en el que los vecinos y vecinas les trasladaron sus preocupaciones y demandas en materia ambiental, “centradas, sobre todo, en la Ordenación del Territorio; la regulación de determinadas zonas que hay que proteger y la gestión y el tratamiento de escombros. Además,” anotó la presidenta insular, “hemos comprobado la necesidad de adaptar servicios e infraestructuras a la realidad de una isla que vive en el siglo XXI”.
Miguel Ángel Pérez, por su parte, explicó que “queríamos conocer de primera mano la problemática en materia ambiental que existe en una isla que lleva años exigiendo una serie de mejoras tanto en el pueblo como en el entorno natural que hay que resolver”.
Tras el encuentro y la visita, Corujo y Pérez se comprometieron a “trabajar de inmediato para ofrecer soluciones reales y efectivas que resuelvan una problemática que afecta a los vecinos de La Graciosa desde hace ya demasiados años”.
Visita a Montañas del Fuego
La presidenta del Cabildo de Lanzarote y el viceconsejero para la Lucha contra el cambio climático del Gobierno de Canarias se habían trasladado con anterioridad a las Montañas del Fuego para buscar una solución alternativa más sostenible y eficiente a una instalación que, actualmente, funciona con dos motores eléctricos en un entorno tan sensible como es Timanfaya.